Beneficio en la ley no implica una aplicación automática por la autoridad

Durante su vigencia, la Ley del Impuesto Empresarial a Tasa Única (IETU) introdujo un enfoque alternativo al cálculo del impuesto empresarial en México, marcando una diferencia con el Impuesto sobre la Renta al privilegiar un esquema de flujo de efectivo. Uno de los aspectos más particulares de este régimen fue la posibilidad de que, en casos de fiscalización, los ingresos del contribuyente se determinaran en forma presuntiva. En esos casos, el legislador incorporó una alternativa que otorgaba al propio contribuyente la opción de simplificar el cálculo del impuesto mediante la aplicación de un coeficiente fijo del 54% a los ingresos presuntivos. Esta medida, contenida en el Artículo 19 de la ley, fue diseñada como una prerrogativa exclusiva del contribuyente y no como una obligación para la autoridad.